La riqueza del Traje Regional Aragonés, su variedad y color, viene dada principalmente y como es lógico, por las diferencias climatológicas de nuestra región. La uniformidad a la que estábamos acostumbrados años atrás queda obsoleta. Uniformidad que había calado en nuestras retinas, por la vestimenta que utilizan los grupos de jota, que por otra parte han ayudado a la difusión y mantenimiento del Traje Típico Aragonés.
La etnografía Aragonesa estructura en tres, las diferencias de la Indumentaria folclórica, siendo de sentido común agruparlas en: Pirineos, Depresión del Ebro y Sistema Ibérico.
El aislamiento de algunas poblaciones del Pirineo, colaboró con la conservación de sus peculiares indumentarias, ricas en atuendos y atavíos de paños de lana teñidos de colores variados, con los que se confeccionaban las basquiñas, refajos, faldas, jubones, chaquetas, calzones o capas. Éstas prendas se elaboraban de forma artesanal, en casa, al igual que la ropa interior de lino. Sin embargo los mantones y cintas provenían de mercados e intercambios con Francia, de donde la vestimenta toma una gran influencia dada su cercanía geográfica.
En la Depresión del Ebro el clima se caracteriza por sus fríos inviernos y calurosos veranos, un clima árido y una zona en la que se sitúa la capital, Zaragoza. Por éste motivo, en ésta zona de nuestra Región la moda era más cambiante, ya que su facilidad de adquisición y sus mercados, servían en bandeja ésta posibilidad.
El Sistema Ibérico es una zona principalmente agrícola y ganadera, la zona suroeste de Aragón es fría y húmeda en invierno y cálida en verano. Las mujeres lucían faldas cortas en llamativos colores rojos y amarillos que en ocasiones tejían de manera artesana con la lana de su propio ganado, al igual que los refajos y las capas.
Como es natural, las zonas limítrofes a La Rioja, Navarra, Cataluña, Valencia o Castilla, también eran influidas por la indumentaria que por esa parte de nuestro país era más predominante.
El acceso a los mercados y tiendas, la materia prima con la que elaborar las prendas en casa, así como la zona geográfica que marcará su clima, son las verdaderas grandes influencias que determinan las características específicas de cada Indumentaria, que deja en manos de las prendas artesanas la inmensa variedad de nuestro Traje Típico Aragonés.
Variedad a la que contribuye «El Pequeño Catalán» desde 1860, seis generaciones ofreciendo calidad y servicio.